La vida fue creada por Dios o la naturaleza, como cada uno lo imagine o crea, solamente para ser vivida. La vida es como un rio que fluye, continuamente, sin ningun fin determinado.Si fluyes con la vida tienes una mentalidad religiosa, si la vida es solamente un instrumento para hacer cosas, solo en tu provecho, tienes una mentalidad politica.
Lao Tzu decia: " Si fluyes con la vida seras religioso ". Y el maestro de Nazaret decia algo similar: " No pienses en el mañana, cada dia trae su propio afan. Mira los lirios del campo que estan floreciendo ahora ".
Cuando el hombre decidio usar la vida para fines ajenos a si mismo, por lo cual tenia que vivir planificando, comienza a echar las bases de la desdicha. Esto lo obliga desarraigarse de la naturaleza, del todo, dando la espalda a su origen.
La necesidad de hacer cosas trae aparejado la idea del futuro para poder realizarlas, y la idea de la esperanza como el aliento para poder llegar hasta el final.
Ambas cosas llevan al hombre a perder contacto con su ser esencial, y no otra cosa significa ser un desdichado.
Al separarse de la totalidad, al renunciar a vivir en el momento presente, lo cual implica vivir fuera del tiempo en que vive, no puede otra cosa que pagar con la desdicha el precio de su aventura.
Unos viven empeñados en torcer la historia, y otros, los llamados mansos de corazon han entendido que la vida es un misterio y simplemente la disfrutan.
Lao Tzu decia: " Si fluyes con la vida seras religioso ". Y el maestro de Nazaret decia algo similar: " No pienses en el mañana, cada dia trae su propio afan. Mira los lirios del campo que estan floreciendo ahora ".
Cuando el hombre decidio usar la vida para fines ajenos a si mismo, por lo cual tenia que vivir planificando, comienza a echar las bases de la desdicha. Esto lo obliga desarraigarse de la naturaleza, del todo, dando la espalda a su origen.
La necesidad de hacer cosas trae aparejado la idea del futuro para poder realizarlas, y la idea de la esperanza como el aliento para poder llegar hasta el final.
Ambas cosas llevan al hombre a perder contacto con su ser esencial, y no otra cosa significa ser un desdichado.
Al separarse de la totalidad, al renunciar a vivir en el momento presente, lo cual implica vivir fuera del tiempo en que vive, no puede otra cosa que pagar con la desdicha el precio de su aventura.
Unos viven empeñados en torcer la historia, y otros, los llamados mansos de corazon han entendido que la vida es un misterio y simplemente la disfrutan.
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